En varias Mitologias asiáticas principalmente China, Japón y Corea, Hablan acerca de un zorro de nueve colas poseedor de un gran poder, sabiduría y en ocasiones una gran maldad.

En varias Mitologías asiáticas, especialmente
en China (piying), Corea (Gumiho) y Japón (Kyūbi kitsune), el zorro de nueve colas es una criatura mitológica que aparece en muchos cuentos.

De acuerdo con esos cuentos, un zorro que
vive  miles de años se convierte en un Gumiho, al igual que sus japoneses y chinos homólogos. Se puede libremente
transformar, entre otras cosas, en una hermosa muchacha que a menudo se dispone a seducir a los hombres, y comerse el hígado o
corazón (según la leyenda). Hay numerosos cuentos en los que el Gumiho aparece,
varios de los cuales se pueden encontrar en la enciclopédica Compendio de
Literatura Oral de Corea. Las Gumihos son criaturas malvadas por naturaleza  y son mujeres tradicionalmente.

Todos los espíritus zorro se explican como el
resultado de una gran longevidad o acumulación de energía. El Gumiho casi
siempre es tratado como una figura benigna que se alimenta de carne humana. No
está claro en qué momento los coreanos comenzaron a ver a los Gumihos como una
criatura puramente malvada, ya que muchos textos antiguos mencionan a un benévolo Gumiho que ayuda a los seres humanos (e incluso hacen menciones de seres
humanos malvados que engañan aun ingenuo Gumiho). En la literatura posterior, los Gumiho fueron representados
a menudo como un sanguinario mitad zorro, mitad humano, criaturas que vagaban
cementerios de noche, excavando los corazones humanos fuera de las tumbas.

La mayoría de las leyendas afirman que
mientras un Gumiho era capaz de cambiar su aspecto, se podría observar rasgos
del zorro (es decir, una cara de zorro con un conjunto de orejas o las 9 colas).
En la transformación de la Gumiho (구미호의변신),
un Gumiho se transforma en una imagen idéntica a una novia en una boda y sólo
se descubre cuando se quitan la ropa.

A pesar de que tienen la capacidad de cambiar
de forma, la verdadera identidad de un Gumiho se decía que era celosamente guardado
por ellos mismos. Algunos cuentos dicen que si un Gumiho abstiene de matar y
comer seres humanos durante mil días, puede convertirse en humano. Otros, como
el drama Gumiho: Tale of Child
Fox, dicen que un Gumiho puede llegar a ser humano si el hombre que
ve a su verdadera naturaleza mantiene el secreto durante diez años. O en el
drama The Man Milésimo, se dice que si un kumiho come la cantidad total de 1000
hígados de hombres en un período de 1000 años, puede convertirse en humano, de
lo contrario se disuelve en burbujas. 

Al igual que los hombres lobo o vampiros
en la tradición occidental, siempre hay variaciones sobre el mito en función de
las libertades que cada historia tiene con la leyenda. Una versión de la
mitología, sin embargo, sostiene que con la voluntad suficiente, un Gumiho
adicional podría ascender desde su yokwe (monstruo) y convertirse en permanente
estado humano y perder su carácter malvado. Explicaciones de cómo esto podría
lograrse varían, pero a veces incluyen aspectos tales como abstenerse de matar
o degustar carne durante mil días.

En la mitología japonesa, los kyūbi
no kitsune (九尾の狐,
«zorros de nueve colas») son kitsune que tienen mil años de edad. Físicamente, los
kitsune sobresalen por su cantidad de colas, pues llegan a tener hasta nueve.
Generalmente, un gran número de colas distingue a un zorro más longevo y más
poderoso; de hecho, algunas narraciones populares mencionan que un zorro
adquirirá colas adicionales cuando haya alcanzado los mil años. En las
historias son comunes los kitsune de una, cinco, siete y nueve colas. Cuando un
kitsune obtiene su novena cola, su pelaje se vuelve blanco o dorado. Los kyūbi
no kitsune tienen la habilidad de ver y oír cualquier suceso que ocurra en el
mundo. Otras historias le atribuyen sabiduría infinita, esencialmente
omnisciente (Estudioso) , además de los poderes tradicionales de los kitsune.

Por otro lado las historias folclóricas
chinas relatan acerca del huli jing, un espíritu de zorro parecido
al kitsune y que posee nueve colas. 

Deja un comentario.