Las melodías, bailes, conceptos, vestuarios y la gran variedad de colores en los videoclips es lo que ha hecho tan famoso y particular al K-pop; y es precisamente esto lo que ha llevado a los jóvenes a querer imitar a sus ídolos favoritos dando paso a los ya conocidos grupos de Dance Cover.

 

A raíz de la fama de la canción viral GANGNAM STYLE de PSY en 2012 y la creciente popularidad que actualmente ha ganado BTS al ser el primer grupo sur coreano en entrar a la lista de los Billboard, en todo el mundo y principalmente Latinoamérica se ha desatado la fiebre K-pop.

 

Chicas y chicos de todas las edades que disfrutan del K-pop y sus bailes casi perfectamente sincronizados pueden ser encontrados en las calles de la CDMX los fines de semana frente a las oficinas del Teatro Julio Jiménez Rueda del ISSSTE; ubicado en la colonia Cuauhtémoc, frente al Monumento a la Revolución; edificio que gracias a sus amplias ventanas que funcionan como espejos son el punto de reunión y el lugar perfecto para ensayar durante horas.

 

Emi, líder del grupo Main Event que lleva oficialmente un año activo, es uno de los muchos chicos que disfrutan de formar parte de un grupo “En lo personal me siento muy liberado, te expresas mucho y más que distraer tu mente, porque creo que ese término está mal utilizado, sacas todo lo malo que tienes. Todos tenemos problemas de vez en cuando y toda esa energía la transformas en algo bonito.”

 

 

Para la mayoría de los chicos formar parte de un grupo de Dance Cover es mucho más que sólo imitar a sus ídolos en sus energéticos bailes y vestuarios llenos de brillos y extravagancia pero también de sencillez y elegancia, es liberarse, divertiste, buscar su propia personalidad haciendo lo que les gusta y de una manera sana. Cabe destacar que esto no constituye forzosamente su plan de vida, muchos de ellos, principalmente estudiantes, tienen sus metas personales bien definidas.

 

Lui, de 22 estudia Comedia Musical; Alejandra, de 17 años, quiere estudiar Psicología; Bere, de 17, Arquitectura; César, de 16, Gastronomía y así como ellos hay muchos más; pero está claro que formar parte del Kpop World Festival, el concurso de Dance Cover más grande del mundo, que desde 2011 les da la oportunidad a los participantes de viajar a Corea y que sólo en México el año pasado el Centro Cultural Coreano recibió cerca de 200 solicitudes para participar, es la más grande meta que como grupo estos jóvenes se fijan para sí mismos.

 

Ciertamente estar dentro de un grupo de Dance Cover, así como muchas otras cosas en la vida, implica un gasto de tiempo, esfuerzo y dinero, este último en transporte, alimento y vestuario, gastos que algunos cubren con lo ganado en el trabajo o lo proporcionado por sus padres, pero el pararse al frente de un escenario por pequeño o grande que sea como K’show, TNT, J’fest o inclusive el Kpop World Festival, es una sensación irremplazable de la mejor época de la vida, la juventud.

 

 

 

 

Paula Gisela Sánchez Morales

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